En un notable caso de rescate, una joven castora fue encontrada en un estado crítico en un campo abierto del condado de Loudon, Virginia, lejos de su hábitat natural. Letárgica y sin intentar escapar, el personal de Servicios para Animales activó inmediatamente un protocolo de rescate. La castora fue trasladada al Centro de Rehabilitación y Educación de Vida Silvestre Kristi’s Caring Hands, donde se constató la gravedad de su condición.
Los veterinarios del centro realizaron un examen exhaustivo que reveló un estado de salud alarmante, con problemas respiratorios y lesiones internas. El equipo brindó cuidados paliativos y monitoreo constante. Las evaluaciones indicaron que la castora había estado sin sus padres entre 24 y 48 horas, lo que esclareció su debilitamiento y el hallazgo en un campo abierto. A medida que fue mejorando con el tratamiento, comenzaron a aparecer indicios de lo que pudo haberle sucedido, incluyendo una posible inundación de su hogar.
Gracias a los cuidados y la atención profesional, la castora logró recuperar su fuerza y salud en un mes. Sin embargo, su rehabilitación continúa, ya que necesita estar en un ambiente propicio junto a otros castores para desarrollarse plenamente. Con el tiempo, los cuidadores tienen esperanzas de que pueda ser liberada y reintegrarse a su ecosistema, donde su papel es crucial al mantener la salud de los humedales y las cuencas hídricas.