En los últimos días, se ha generado un intenso debate en la Argentina respecto a los salarios de los controladores aéreos. El conflicto surge en medio de un paro nacional impulsado por la Asociación de Técnicos y Empleados de Protección y Seguridad a la Aeronavegación (Atepsa), que afecta a miles de pasajeros y pone en evidencia la situación salarial del sector.
La escala salarial vigente y su falta de actualización
Según información proporcionada por el gremio, la escala salarial que rige en la actualidad fue acordada en agosto de 2024 y no ha recibido ajustes en el último año. Esto ha provocado reclamos por parte de los controladores, quienes exigen una revisión salarial y mejores condiciones laborales.
La grilla salarial vigente en agosto de 2025 establecía los siguientes montos por categoría:
- Cat. 2: 889.760 pesos
- Cat. 3: 982.950 pesos
- Cat. 4: 1.076.110 pesos
- Cat. 5: 1.158.050 pesos
- Cat. 6: 1.240.100 pesos
- Cat. 7: 1.322.090 pesos
- Cat. 8: 1.422.720 pesos
- Cat. 9: 1.523.380 pesos
Compatibilidad y progresión salarial
El gremio explicó que más del 70% de los trabajadores controladores están en las categorías 4 y 5, con posibilidades de ascenso a supervisores, instructores o jefes de dependencia con el tiempo. Sin embargo, el proceso puede demorar hasta cinco años para quienes ingresan en las categorías inferiores, lo que genera una disparidad salarial y una sensación de indefensión.
Reclamos y negociaciones
Atepsa reclama una propuesta salarial concreta y firmada que contemple una actualización real frente a la pérdida de poder adquisitivo. La respuesta de las autoridades ha sido negativa, rechazando las versiones de la negociación y las medidas de fuerza.
Desde la Empresa Argentina de Navegación Aérea (EANA) explicaron que la insistencia del gremio en las huelgas afecta un servicio esencial garantizado por ley, y que en las 17 audiencias de negociación no se alcanzó acuerdo debido a la postura intransigente del sindicato.
Impacto de los paros y situación actual
El paro, que comenzó el viernes y continúa hasta el sábado 30 de agosto, paraliza los movimientos en los aeropuertos, afectando a más de 44.000 pasajeros. Las medidas incluyen cortes en la salida y llegada de vuelos, y en la comunicación de planes de vuelo, lo que genera una gran preocupación en el sector turístico y en las operaciones aéreas.
El Gobierno sostiene que las negociaciones continúan, y que han presentado propuestas de aumento, como una del 15%, que aún no fue aceptada por el gremio. Mientras tanto, los controladores siguen en huelga y exigen una mejor oferta salarial para evitar futuros conflictos y garantizar la estabilidad del sector.