La historia de Joan MacDonald, una canadiense que a los 70 años decidió cambiar su vida, es un ejemplo inspirador de cómo se puede conservar la masa muscular a pesar de la edad avanzada. En su perfil de Instagram, en lugar de describirse como “79 years old”, utiliza “79 years young”. Desde hace casi una década, comparte su camino desde el sedentarismo hasta convertirse en un referente del fitness para personas mayores. Según cuenta, su deterioro de salud la llevó a tomar acción, y ahora, a sus 79 años, es un símbolo de superación.
A medida que los años avanzan, muchas personas experimentan un deterioro físico que les impide disfrutar de su tiempo libre. Sin embargo, especialistas afirman que el mantenimiento de la masa muscular es fundamental para una longevidad de calidad. Estudios han demostrado que un mayor desarrollo muscular está asociado con una menor inflamación crónica, mejor metabolismo y una disminución en el riesgo de enfermedades neurodegenerativas. Las experiencias de personas como Joan muestran que nunca es tarde para adoptar nuevos hábitos saludables.
El doctor Ramiro Heredia, un especialista en Medicina Interna, explica que no todos envejecemos de la misma manera. Factores como los hábitos alimenticios y la genética juegan un papel crucial en el envejecimiento biológico. Introducir un estilo de vida saludable que incluya ejercicio regular y una buena nutrición puede mejorar considerablemente la calidad de vida en la tercera edad. Además, la médica funcional Agustina de Dios recalca la importancia del ejercicio de fuerza y la ingesta adecuada de proteínas como pilares fundamentales para prevenir enfermedades crónicas y mantener la autonomía, vital para una vida plena y activa.