En un contexto de dificultades financieras crecientes, el gobernador de Entre Ríos, Rogelio Frigerio, ha tomado la decisión de congelar desde el 1° de julio todas las actualizaciones salariales para funcionarios políticos de la provincia. Esta medida se implementa después de una semana en la que todos los mandatarios provinciales se unieron para reclamar mayores recursos a la Casa Rosada. Frigerio expresó que la situación económica de la provincia es “muy delicada”, mencionando la caída en la coparticipación federal y la baja recaudación como factores clave en este escenario.
El decreto que formaliza la suspensión salarial también invita a los poderes Legislativo y Judicial a sumarse a esta iniciativa. En apoyo, el bloque de senadores de Juntos por el Cambio expresó su respaldo, afirmando que están de acuerdo con la suspensión de las actualizaciones salariales y dietas para los senadores. Por su parte, el Ministerio de Hacienda y Finanzas tendrá la facultad de modificar o levantar la medida si hay una mejora en la situación fiscal del estado.
El congelamiento salarial no es un hecho aislado. Otras provincias, como Santa Cruz y Chaco, también están implementando ajustes. En Santa Cruz, se desechó la “cláusula gatillo” en los acuerdos paritarios del sector salud, mientras que en Chaco, se redujeron los viáticos en un 30% y se suspendieron contratos de la gestión anterior. Estas medidas reflejan un sentiment generalizado entre los gobernadores respecto a la necesidad de racionalizar el gasto público mientras enfrentan una caída significativa en las transferencias por coparticipación, que, según el Ministerio de Economía, se redujo en un 23,8% en promedio en mayo en comparación con el año anterior.