El gobierno de Javier Milei ha decidido avanzar en un plan para reforzar la presencia militar argentina en el extranjero, firmando un memorándum de entendimiento en Copenhague para la apertura de una Agregaduría de Defensa en Dinamarca. El ministro de Defensa, Luis Petri, expresó que esta medida se alinea con una estrategia más amplia de la política exterior del país, buscando fortalecer las relaciones con “países amigos” y responder a las tensiones geopolíticas actuales, especialmente en el contexto de la crisis entre Irán e Israel.
Pori medio de esta iniciativa, el gobierno argentino pretende ampliar su red de agregadurías militares, que actualmente incluye aproximadamente 35 representantes en 21 países y en la ONU. Este despliegue cubre un 20% de las misiones diplomáticas argentinas en el mundo y se ha visto reducido en años recientes debido a recortes presupuestarios que llevaron al cierre de agregadurías en varias naciones. Ahora, con el objetivo de dejar atrás el aislamiento, el ministerio espera revitalizar este aspecto de la diplomacia argentina, introduciendo a oficiales de alto rango que participen en misiones internacionales.
La apertura de la nueva Agregaduría de Defensa en Dinamarca es solo el inicio de un plan más ambicioso. Petri ha destacado que el fortalecimiento de la diplomacia militar no solo busca responder a los desafíos inmediatos, sino también establecer alianzas duraderas y colaborar con otros países en áreas como el entrenamiento y la modernización de las Fuerzas Armadas. Con una inversión significativa en aviones F-16 provenientes de Dinamarca, la colaboración militar se perfila como un aspecto central de la política exterior del gobierno de Milei, capaz de posicionar a Argentina como un actor clave en los debates sobre seguridad y defensa a nivel global.