Novak Djokovic se prepara para su participación en Wimbledon, donde este martes comenzará su intento por conquistar un octavo título en el All England Club, lo que podría ser una de sus últimas grandes oportunidades en el circuito profesional. Con 24 títulos de Grand Slam en su haber, el serbio se muestra optimista, pero consciente de que la próxima aparición podría ser la última en un torneo tan emblemático como este. En su reciente interacción con la número uno del mundo, Aryna Sabalenka, Djokovic mostró su faceta más distendida, dedicándole un consejo humorístico durante una conferencia de prensa, lo que destaca su capacidad para combinar competitividad y buen humor.
Djokovic ha sido un protagonista constante en Wimbledon, habiendo ganado el torneo en siete ocasiones. En su preparación, interrumpió la conferencia de Sabalenka para aportar algo de diversión, recordando que la relación con los jugadores no siempre es formal. Sus comentarios sobre la intensidad de Sabalenka en la cancha fueron recibidos con risas, una muestra de la camaradería que a veces se establece entre los competidores en el tenis. Sin embargo, detrás de esta ligereza, Djokovic enfrenta la realidad de que su tiempo en el circuito es limitado y cada torneo podría marcar el cierre de su carrera deportiva.
A medida que se acerca a su debut en el torneo, Djokovic reflexiona sobre su futuro y lo que representa jugar en Wimbledon. “Podría ser mi último baile”, admite, algo que ha repetido en varias ocasiones. Su deseo es continuar compitiendo a un alto nivel, pero también es consciente de la incertidumbre que la edad y los desafíos físicos pueden traer. Aunque ha enfrentado a jóvenes talentos como Carlos Alcaraz, que ya lo han derrotado en dos finales recientes de este torneo, Djokovic se muestra confiado en que Wimbledon puede ofrecerle la mejor oportunidad para sumar un título más a su increíble carrera.
