Este viernes 27 de junio, la disputa entre el gobierno argentino y los empleados públicos se intensificó cuando la Justicia resolvió a favor de los gremios, permitiendo que el asueto por el Día del Empleado Público vuelva a estar en vigor. La intervención del Juzgado Nacional Nº3 de primera instancia del Trabajo, liderado por la jueza Moira Fullana, hizo lugar a una medida cautelar presentada por la Asociación de Trabajadores del Estado (ATE), anulando así la decisión del Ejecutivo que obligaba a los empleados a trabajar normalmente.
La resolución de la jueza pospuso temporalmente la derogación del asueto estipulado por el decreto D.N.U. 430/25. Este fallo no solo respeta el derecho al descanso de los empleados públicos, sino que también refleja el continuo enfrentamiento entre el gobierno y los sindicatos, en un contexto ya complicado por la situación económica del país. La magistrada ordenó que se mantenga el asueto mientras se espera una sentencia definitiva respecto al fondo del asunto.
En respuesta a la sentencia, el Gobierno se manifestó en su intención de apelar la decisión judicial. Manuel Adorni, vocero presidencial, calificó la situación como producto de una “mafia sindical”, reafirmando así la tensión existente entre las autoridades y el gremio. La jornada de hoy simboliza no solo un conflicto laboral, sino también un nuevo episodio en la complicada relación entre el Gobierno y los trabajadores estatales en Argentina.
